Es el momento
de recuperar la memoria
y la tradición oral del caribe

La cultura del Caribe Colombiano se narra con las voces de los diferentes grupos étnicos con presencia en nuestra tierra: la población indígena, la población raizal del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina; la población afro -de la que también hacen parte los palenqueros de San Basilio, del municipio de Mahates (Bolívar); y la población Rrom o gitana. En Memorias de la Habladora se presentan narraciones típicas de cada uno de estos grupos étnicos como estrategia para la preservación de la tradición oral y la memoria colectiva del Caribe. Cada una de estas narraciones nutren nuestro Repositorio digital transmedia, resaltando la riqueza y la fuerza creadora de la tradición oral Afro, Indígena, Raizal y Rrom.

Para la construcción de Memorias de la Habladora entrelazamos etnia y género en la voz de mujeres jóvenes, nuestras habladoras, que narran sus historias personales, los relatos propios de sus pueblos y la forma en cómo ellas se relacionan con sus culturas a partir de sus vivencias personales. Nuestra propuesta incluye una perspectiva en la que son ellas mismas quienes hablan de los relatos y las historias de sus grupos étnicos y de sus propias vidas, experiencias y formas de relacionarse con la cultura para evidenciar cómo las nuevas generaciones están preservando su cultura. Dentro de nuestras producciones rescatamos historias de mujeres de la comunidad LBT, para así seguir trazando caminos que nos acerquen como sociedad, a través de la cultura, a la dignidad y la igualdad en la diversidad de nuestro país.

Para apreciar este trabajo cultural, es necesario dejarse llevar por la palabra de las habladoras que tenemos el gusto de presentar: son ellas las que, a pesar de ser jóvenes, luchan por mantener viva, con sus palabras, su identidad y el rumbo mismo de sus pueblos a partir de la palabra, de la tradición, de la memoria. Como expresiones culturales, a partir los relatos que hacen parte de su tradición oral, las habladoras recrean un imaginario que entreteje la vida personal con la del colectivo, manteniendo cohesionada a la sociedad.

Desde iniciativas como las del Repositorio se empieza a construir una ciudadanía fortalecida desde la pluralidad, de una pluralidad cultural necesaria para enraizar en la sociedad colombiana los valores propios de la Democracia.